Brazadas



Si yo estuviera en medio del mar…
Empezaría a pensar… hasta encontrar un motivo que me impulsara a seguir vivo.
Y por cada motivo que encontrara daría una brazada hacia adelante, si es que hay un adelante cuando uno está en la inmensidad del mar.
¿Qué podría motivarme a sobrevivir?
Veamos…
…volver a ver a mis padres y decirles, de una vez, que los quiero.  Una brazada.
…decirle a mi esposa lo mucho que la amo, aún cuando no se lo demuestre por temor a parecer sensiblero. Dos brazadas.
…ir al parque con mis hijos y terminar todo adolorido de tanto jugar al fútbol. Tres…
…reunirme más seguido con mis amigos, en vez de reunirme tanto con mis papeles de trabajo. Cuatro…
…moler a golpes al capitán de ese barco que confundió una roca con una nube de niebla. Cinco…
… aprender a tocar el piano como siempre quise. Seis…
…ver esa película que tanto me hizo sonreír,  y ésta vez sí reírme a carcajadas. Siete…
…empezar a comportarme como  un hombre y llorar cada vez que realmente lo necesite, no hacerme el tipo rudo y fuerte. Ocho…
…aprender a vivir con mis debilidades y defectos y dejar de mostrarme como la persona autosuficiente y maravillosa que en realidad no soy. Nueve…
…dejar de seguir los sueños que otros soñaron para mí y comenzar a transitar mi propio y más grande sueño. Diez…


… once, doce, trece, catorce….
…Noventa…el mar es inmenso… o quizá yo tenía muchos motivos para vivir y por ello muchas brazadas.
Cualquiera fuera la razón, al cabo de mil trescientas  brazadas logré encontrar un barco de turistas que me recogió.
Luego de los habituales trámites de salud, me acomodaron en un camarote muy confortable y, finalmente, me preguntaron:
-¿Cómo logró mantener las fuerzas para nadar tantos kilómetros?
-Simplemente recordé una inmensa cantidad de motivos por los cuales quería sobrevivir. Y el más importante de todas fue… ése, quería vivir, pero esta vez hacerlo de verdad. Ahora sólo eso haré. Vi-vir, nada menos. Ahora, si me disculpan, necesito una buena siesta. Buenas noches y muchas gracias por sus atenciones.
FIN




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Comentarios

MyM ha dicho que…
Hermoso relato Vaeneria. Muy motivador y con un mensaje muy profundo; las brazadas por lo que vale la pena vivir.
Un abrazo y gracias por compartirlo
Anónimo ha dicho que…
Somos muchos los naufragos en ese inmenso mar.. sigamos braceando.. son muchos los motivos ...

cool post

peace
LAO ha dicho que…
Es muy lindo como lo describes y mas profundo que el mar... siempre tendrás razones para dar brazadas... un beso Vaeneria.
Vaeneria ha dicho que…
Realmente todos tenemos motivos para seguir nadando, aún cuando creamos que no es así. El simple miedo a la muerte y el invencible deseo de vivir ya son suficientes.
Gracias por sus comentarios. Me alegraron muchísimo.
Un beso grande :)
Gabriela Maiorano ha dicho que…
Hola Vaeneria!! Volví al mundo bloguero y estoy visitando a mis amigos y leyendo sus blogs. Me encantaron los relatos. Cada día mejor!!
Besosssss
Nelita ha dicho que…
Hola Vaeneria, pasé a saludarte y agradecer tu comentario a mi blog, me gustaron mucho los poemas que tienes, gracias x compartir

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